PÉRDIDA Y DUELO EN TIEMPOS DE PANDEMIA
La pérdida y el duelo son partes de la vida del ser humano, son inherentes a él. Sin embargo, la sorpresa con la que la pandemia nos tomó a todos y todas, nos hizo cuestionarnos sobre nuestra fragilidad y la ilusión que tenemos de la permanencia de objetos y de personas en nuestra vida.
¿Qué es una pérdida?, esta palabra se usa para nombrar la ausencia o la falta de algo que se tenía, el duelo es el proceso de adaptación emocional a una pérdida.
En la pandemia han sido innumerables las pérdidas que hemos tenido, rutinas, trabajo, amigos, familiares, relaciones, cambios de creencias y paradigmas que se han roto.
Los expertos nos dicen que el duelo es un proceso natural, que es importante tenernos paciencia, darnos cuenta de que hay sentimientos que nos surgen a veces sin control y que hay que identificarlos y atenderlos.
La destacada tanatóloga Kübler Ross nos menciona en sus libros 5 etapas del proceso de duelo: La negación, el enojo, el regateo, la tristeza y finalmente la aceptación. Algunos otros autores agregan el shock o confusión al principio y otros el aprendizaje al final. Dependiendo de lo valioso que era la persona, objeto o circunstancia, y de nuestra personalidad, será el tiempo del duelo.
Fundamental para atravesar este proceso es confiar en nosotros mismos, pensar que sí estamos capacitados para atravesarlo, darnos ese espacio de sentir y experimentar nuestros sentimientos, de enojarnos, a veces de llorar, a veces de no creer lo que pasó y de contarlo una y otra vez, porque un duelo no es lineal y es diferente en cada persona. A veces ayudará el preguntarme, ¿Qué necesito hoy? ¿Qué necesito para estar mejor?
Otro punto importante es buscar nuestras redes de apoyo en familiares y amistades, no encerrarnos, buscar aquellas personas que nos muestran empatía y nos pueden apoyar. Compartir con ellas lo que sentimos sin reprimir nuestros sentimientos.
Cuando se vive el dolor de una pérdida, a veces, es una escucha cariñosa y empática más importante que las palabras que pudiéramos decir.
En medio de la pandemia y al no tener esta cercanía física, será importante recurrir a apoyos como las reuniones por medios electrónicos como la computadora y el teléfono, y hacer rituales que nos ayuden a despedirnos de nuestro ser querido, si este es el caso, honrando su vida y agradeciendo lo que nos ha dejado.
Es de reconocer que si contamos con creencias religiosas y/o espirituales serán de gran ayuda pues aportan una visión de trascendencia y esperanza para seguir adelante en la vida.
La pandemia es una situación global que nos enfrenta a una realidad a veces difícil de aceptar: que nada es permanente, pero que por lo mismo podemos apreciar y valorar más nuestra vida, reflexionar qué es lo valioso de ella, qué es lo realmente importante, y cómo a partir de esta fragilidad puedo salir más fortalecido/a y vivir más plenamente, pues como decía el gran Dr. Victor Frankl creador de la logoterapia, asumir el compromiso de vivir "es decir a la vida sí, a pesar de todo".
Por Mtra. Alejandra Guzmán Pineda, Coordinadora del Diplomado Enfrentando las Pérdidas de la Vida